Puede parecer una tontería, pero muchas veces, me he encontrado a gente que no sabe qué hacer o cómo reaccionar ante uno, o que simplemente diciéndoles como deberían haber actuado, se sorprenden al darse cuenta que es una situación que muchas veces se puede solventar sin problemas.
Los mareos en su mayoría están relacionados con la tensión arterial.
Como os he comentado en alguna ocasión, la tensión arterial es la fuerza (presión) que ejerce la sangre contra la pared de las arterias. ¿Pero qué pasa si esa tensión no es suficiente?
Que nuestro cuerpo responde ante esa situación con el mareo, consecuencia de una bajada de tensión arterial: un flujo insuficiente de sangre al corazón, al cerebro y a otros órganos vitales.
Cuando comienzas a marearte, comenzarás a notar como empiezas a tener una visión borrosa y sudarás, pero este sudor será un sudor frío. La tensión está bajando.¿Qué hacemos?
El remedio es muy fácil.
Túmbate en el suelo. Sí, has leído bien.
Lo que tienes que provocar es que se restablezca el flujo de sangre.
Si te encuentras solo en el momento del mareo, tumbado en el suelo notarás una mejoría instantánea, y si hay alguien contigo, que te sujete las piernas mientras estas en el suelo.
Para los que no lo sepáis, cuando alguien en el hospital nos avisa que se marea, lo primero que hacemos es si está levantado meterlo en la cama, y si ésta persona ya estaba en la cama cuando se ha producido el mareo, ponemos la cama en posición de trendelemburg.
![](https://elaticodejulie.files.wordpress.com/2009/12/table-position-2.jpg)
Como podéis observar en la imagen, la posición de trendelemburg se basa en la misma actuación que os he comentado que adoptéis ante un mareo, (tumbarse y piernas hacia arriba).
Esta solución es para mareos que no estén relacionados obviamente con personas que sufren diabetes, ya que entonces el mareo lo más seguro es que este relacionado con una bajada de azúcar y no con la tensión, por lo que necesitará tomar azúcar y no sólo estar tumbado.
Cuando una persona está mareada tiende siempre a buscar algún sitio en donde sentarse, y si está en la calle algún banco. Mal hecho, no lo intentes, actúa y túmbate.
Las consecuencias de querer llegar a ese sitio que parece que está cerca puede acarrear una caída, con el posterior traumatismo que puedas sufrir.
Si sigues este consejo tan simple y práctico, te puedes ahorrar una visita al hospital, y tu cuerpo y tu salud te lo agradecerá.